Sabemos que eres bella, solo falta que te sientas segura. La depilación es uno de los servicios más solicitados hoy en día, ya que cada persona busca verse y sentirse bien, además de encontrar el mejor método que se adapte a su piel y le ofrezca mayores ventajas.
Sí, es posible encontrar la depilación adecuada para ti; existen muchos tipos y aquí te hablaremos de cada uno de ellos, para que los conozcas a fondo y puedas elegir el que más se adapte a tus necesidades, estilo de vida y tipo de piel.
Este método es de los más utilizados por ser el más rápido y sencillo de usar a la hora de eliminar el molesto vello y en cualquier parte del cuerpo. Es ideal para sacarte de un apuro si no tienes tiempo —o ganas— de depilarte.
Este método lo puedes realizar desde la comodidad de tu hogar, además de que es barato y de los más simples; no requiere mucho tiempo para librarte del vellito. Otra ventaja que tiene es que puedes cargar con tu rastrillo o cuchilla, listos para usar rápidamente en cualquier lado.
Es importante que mantengas tu piel hidratada y cuidada, ya que este método puede irritar la piel; incluso tiene el inconveniente de que no arranca el pelo de raíz, por lo que crecerá en un breve período de tiempo. Asegúrate de que siempre esté afilado el que uses, para evitar bultitos rojos o irritación, cortar tu piel o manchas en la zona con el uso constante.
No compartas tu rastrillo, cuchilla o máquina, más que nada por higiene.
Este es el segundo método más tradicional que existe. Se utiliza por ser económico, porque es un método duradero, rápido y además, se adapta muy bien a cualquier parte del cuerpo.
Su mayor ventaja radica en que si se usa continuamente, debilita el crecimiento del vello.
Existen dos tipos de depilación con cera:
Si tienes piel sensible la cera caliente no es el mejor método para ti, además de que es doloroso, genera enrojecimiento, irritación y flacidez. Tampoco se recomienda para personas que padecen de problemas de circulación o varices.
Este método elimina el vello de raíz momentaneamente, ya que en unos días puede crecer; además de que es mucho más rápido, elimina las molestias y cuida tu piel.
Si no has usado métodos como la cera, es posible que duela bastante al principio, pero se va minimizando la sensación, además de que no provoca flacidez.
Este método es similar al rastrillo, ya que no arranca de raíz el vello; así que es un método que lo hará crecer en 2 o 3 días.
Su ventaja radica, a diferencia de la cera, que es indoloro y es muy sencillo de usar, aunque puede provocar irritación.
Este método es más recomendable en zonas faciales, ya que es idóneo para perfilar y definir.
Es rápido y bastante eficaz, pero no es útil en zonas grandes, por cuestión de tiempo y paciencia. Además, puede resultar doloroso y no es permanente.
Este es el tipo más popular hoy en día, ya que es agradable y es de los que mejor elimina de forma casi definitiva el vello. Eso sí, necesitas una valoración antes de realizarla, para conocer si es la indicada para ti.
Existen varios tipos de depilación láser, puedes elegir uno en función de tu tipo de vello y tu tipo de piel.
La inversión es mayor, pero va en proporción a la comodidad y resultados obtenidos ya que calienta la melanina del vello y destruye el folículo piloso.